Citas de Cathy

NOTA IMPORTANTE:

Las "citas" que se muestran en esta entrada solo son para darte una muy breve idea de las cosas que pasaran en el libro.. Pero si no quieres adelantarte al libro entonces es preferible que no sigas leyendo esta entrada y pases a la siguiente entrada.

-Lo siento, te desperté?- preguntó Arthur situado en la entrada del cuarto mientras cerraba la puerta de esta.
Yo automáticamente al afirmar completamente que era la habitacion de él, me había erguido en la cama apoyándome con las manos y parpadeando constantemente intentanto inúltimente convertir todo esto en un sueño y poder despertar.

No bastaba con qué mi cara se pusiera roja; todo mi cuerpo ardía de la vergüenza!
¿Qué había sucedido en la casa de Spencer?
¿Porqué no estaba de pijamada en la casa de Andrea como estaba acordado?
Pero lo más importante:
!¿Porqué estaba durmiendo en la cama de Arthur?!

Cathy

Pedí una hamburguesa con queso y agua embotellada.
-Es para cuidarte?- preguntó curioso porqué había rechazado el refresco.
-uhmm , no, la verdad no. Es solo que no me gusta el refresco, trato de evitarlo, no sé que le ven, aunque acepto algunos sabores pero prefiero no tomar, ¿Y qué tal tú? ¿Dieta?- pregunté con tono sarcástico mientras volteaba a ver otra botella de agua que tenía en la mano derecha.
Solo eso, una botella de agua había pedido.
Aunque al pedir en la caja se había excusado de su falta de apetito con la cena qué había tenido con sus colegas antes de reunirse conmigo, no evité preguntarle.
-hahaha. Correcto- dijo entre risas mientras manejaba con su mano izquierda hacia la salida del estacionamiento de Jim’s...
Me quedé pensando si lo había dicho de broma o si era verdad, pero sea lo que fuese se le hacía gracioso decir que estaba a dieta.....

Cathy

La palabra “niños” había esfumado toda moderación que aún permanecía en mi interior.
-Mounstruo- susurré automáticamente. Acción hecha por mi cuerpo, no por mí. La sangre helada corrría más rápido que nunca en mis venas. Casi casi ardía.
-¿Qué?- preguntó rápidamente Arthur con el mismo tono en que le hablé solo que al voltear, despúes de no haberme encarado por todo el tiempo que estuvimos en el carro de mi mejor amiga, su cara mostró un asombro inmenso en lugar de shock como expresaba la mía.
-Mounstruo – repetí aún en lo bajo pero estaba segura que él lo había podido escuchar.
Y enseguida cuando por fin pude reaccionar por completo, me tapé la boca.

Cathy

Arthur extendió sus alas.
Era increiblemente impresionante.
Parecía un angel en medio del bosque. Un hermoso y perfecto ángel.
Por mi parte solo pude quedarme callada, las palabras no saldrían de mi boca ni aunque lo intentara.

-¿Igual a un demonio verdad?- susurró Arthur con una voz áspera y triste.

No! Quise decirle para calmarlo. Quise consolarlo, reclamarle que no volviera a pensara más en eso. Que él era diferente, que era bueno...
Pero Arthur me había hecho abrir más los ojos.
Tenía razón.

Todo en él mostraba señas de un ángel. Su hermosa cara, su perfecto cabello, su escultural cuerpo de porcelana que ahora se mostraba a la tenue luz que emanaba la luna.
Excepto por sus alas, alas negras que hacían que cambiase todo.
Ahora ya no parecía un ángel.....
Pero sí que lo era.

Cathy

-no tienes mucho tiempo- me dijo
-te matarán cuando sepan que tu me ayudaste y yo no podría...- le dije nerviosamente
-todo estara bien Cathy- dijo mientras se acercaba y me acariciaba la mejilla derecha.
-Arthur vendrá, no tienes que hacer esto, el me sacará sin que tengas que arriesgarte- dije al momento que me alejaba de él, no desfraudaría a Arthur.
Miró al piso y despues volteo a verme de nuevo .
-Siento decirtelo Cathy, pero Arthur no vendrá o por lo menos no a tiempo. Lo atraparon... los otros.. esta gravemente herido, y aunque igual sea nuestro enemigo nos interesa saber como está. Y no sabemos si vivirá...-

Mi corazon se paró. La vida se salia de mi. Arrancame el corazon! Antes de que estallase, porque este sentimiento dolia demasiado.
Pensando todo este tiempo que Andreus y Hilbert habian llegado a tiempo, cuando en realidad todo habia empeorado.

Cathy